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Polémica y la molestia de científicos que han trabajado en torno al sitio arqueológico Monteverde, encabezados por el propio geólogo Mario Pino, generaron las intervenciones que un particular se encuentra realizando en las inmediaciones del histórico sitio ubicado en las afueras de la comuna de Puerto Montt.

Según indicó el Dr. Pino a Radio Bío Bío, los hechos de los que dan cuenta, se trataría de una intervención en cercanías del sitio arqueológico, la cual se lleva adelante sin autorización alguna y donde además de la tala de árboles, también existe extracción de áridos, lo que ha provocado erosión río arriba del Estero Chinchiuapi y la aparición de piscinas, lo que pone en riesgo la exploración científica.

Por ello, el profesional de las ciencias quien ha encabezado las investigaciones en el sitio, emplazó al Gobierno y al Intendente Montes a responder por esta intervención ilegal y ante la nula fiscalización gubernamental en este lugar de gran valor histórico no sólo para nuestro país, sino para el origen del poblamiento de América.

Quien también se refiriró al hecho fue el Secretario Ejecutivo de la Fundación Monte Verde, Eduardo Alvar,  quien aseguro que la institucionalidad "simplemente no funciona". Junto con ello, Alvear agregó que hace unos años atrás presentaron un proyecto para la conservación del sitio, dada los ya existentes problemas de erosión, pero que ninguna autoridad tomó en cuenta.

Por su parte el concejal Leopoldo Pineda, quien ha sido el mayor impulsor del desarrollo y protección de Monteverde a nivel comunal, señaló que él constató en terreno hace dos semanas atrás este hecho y realizó las denuncias correspondientes en el concejo municipal del 04 de octubre pasado.

A raíz de esta denuncia señaló Pineda, el Alcalde de Puerto Montt solicitó que se investiguen los hechos y que la dirección de Obras realice un informe de la situación, el cual aún no se ha realizado.

Pese a ello,  aseguró el edil, el municipio ya ofició a Conaf y a la Dirección de Aguas, para se tomen cartas en el asunto y iniciando una investigación tanto de los posibles daños al sitio arqueológico producidos por la intervención, como así también, si ésta contaba con los debidos permisos, situación de la que se está a la espera.