Repensar el turismo en tiempos de pandemia: una oportunidad única

18 Mayo 2020

Chile tiene todos los recursos para liderar esta verdadera revolución en el arte de viajar.

Raffaele di Biase >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Ciudadano

La pandemia global provocada por el virus Sars-Cov-2 ha dejado al sector turismo de todo el mundo en una situación dramática desde el punto de vista económico y con una sensación de incertidumbre total, que hace aún más difícil proyectar tiempos y formas que permitan planificar una reactivación.

Mientras las empresas intentan sobrevivir los embates de esta profunda crisis, los gobiernos buscan recabar datos que permitan vislumbrar el futuro del sector y diseñar las mejores estrategias de promoción en un escenario de competencia global por captar los primeros viajeros y asegurarles condiciones óptimas de seguridad que generen confianza y sienten las bases para el retorno de los viajes.

Pero un escenario como éste es también una oportunidad única para repensar el turismo y llevar adelante una verdadera refundación del sector basada en reconocer las implicancias negativas que la industria de viajes tiene sobre comunidades y ecosistemas y al mismo tiempo potenciar las virtudes que este sector puede tener sobre el desarrollo sostenible de un país, región o territorio.

Al reconocer que la pandemia se genera por la burda intervención humana en el equilibrio natural, también se reconoce la imperiosa necesidad de generar políticas profundas de desarrollo sostenible ya no más sólo como etiqueta sino con un impacto medible y trazable. Chile tiene todos los recursos para liderar esta verdadera revolución en el arte de viajar.

Recursos humanos y creativos de primer nivel, ecosistemas naturales y prístinos que cualquier destino quisiera tener en su territorio y comunidades resilientes que están dispuestas a trabajar en conjunto para transformar el turismo en uno de los motores principales del desarrollo económico del país. Pero para poder aprovechar esta oportunidad tendremos que dejar de lado los eufemismos y las posturas grises que por un lado fomentan un desarrollo sostenible y por el otro siguen apostando por industrias extractivistas y cortoplacistas que no sólo generan confusión a las comunidades sino también a los potenciales viajeros que no logran desentrañar la verdadera vocación turística del país.

Esta dicotomía puede comenzar finalmente a ser sepultada si aprovechamos la pandemia para sentar las nuevas bases del turismo responsable, seguro y regenerativo en Chile. Filtrar esta actividad a través de los nobles principios de los ODS de Naciones Unidas puede ser un ejercicio revelador y al mismo tiempo ineludible en estos complejos momentos que estamos viviendo. Para esto el mundo privado y público deben avanzar de manera mancomunada, transitando hacia el reconocimiento de la vocación turística para ubicar al sector en el sitial productivo que merece. No podemos seguir utilizando el turismo como salvavidas político o como mero discurso propagandístico, sino como lo que merece ser: un sector económico que puede garantizar un desarrollo democrático y sostenible para ésta y para varias generaciones más.