No violencia a los niños: por una infancia protegida

05 Octubre 2020

Inspirada en esta fecha, insistimos en la urgencia de estar siempre educando y alertando acerca de la dura realidad que afecta a nuestros niños.

Soraya Said >
authenticated user Corresponsal Corresponsal Invitado

Este 2 de Octubre se conmemoró el día por la No Violencia en aniversario del nacimiento de Mahatma Gandhi, líder de la Independencia de la India, inspirador de la filosofía por la no violencia y un fuerte defensor de la paz en el mundo. La Asamblea General de la ONU estableció la conmemoración del Día Internacional como una ocasión para relevar toda acción que tienda a enfatizar la educación y la conciencia pública entorno a la materia.

Inspirada en esta fecha, insistimos en la urgencia de estar siempre educando y alertando acerca de la dura realidad que afecta a nuestros niños.

Existe amplia evidencia clínica y bastante literatura en torno a los traumas ocultos en la infancia, el Doctor en Psicología Infantil, Felipe Lecannelier en su libro “El trauma oculto en la infancia” (2018) aborda datos que son alarmantes, tan solo por mencionar algunos indica que en el año 2016 alrededor de un billón de niños en el mundo sufrieron algún tipo de violencia; que las vulneraciones más severas suelen ocurrir durante los primeros cinco años de vida y que el 75% de los niños que mueren por maltrato de parte de sus cuidadores principales son menores de cuatro años.

Abordándolo desde un carácter institucional y local, tenemos cifras entregadas por la Subsecretaría de Prevención del Delito que reflejan una dura realidad y que ubican a la región de Los Lagos como una de las regiones con más altos índices de maltrato y abuso sexual infantil (107 casos de abuso sexual a menores de 18 años durante el año 2020).

Otro antecedente conocido es que el mayor porcentaje de las situaciones de abuso se generan al interior de las familias. Los efectos más nocivos de la violencia intrafamiliar ocurre dentro de la edad de cuatro años, puesto que el niño no puede escapar o alejarse de la situación de violencia, siendo testigo de escenas de violencia física, emocional o sexual entre los cuidadores o situaciones que implican consumo de alcohol desmedido o drogas.

La familia como espacio de mayor violencia y riesgo para los niños, prende todas las alertas. Aquí requerimos de inversión e iniciativas altamente innovadoras para poder detectar, detener e intervenir a tiempo. Se indica también que los adultos que han sufrido trauma en su infancia incluyen el 100% del sistema carcelario, ello evidencia en parte, que toda política social que integre y aborde vínculos, eduque emociones y haga acompañamientos en la relación padres e hijos deben ser el eje estratégico del trabajo en infancia.

Desde el año 2018 como Ministerio, a través de la Subsecretaría de la Niñez, tenemos la tarea permanente de generar un llamado constante a toda la comunidad a involucrarse en la prevención y protección, esto en esencia significa que esta difícil tarea no solamente corresponde al Estado sino que está en manos de todos como co garantes de los derechos de los niños.

La violencia hacia los niños en todos sus sentidos desde el abuso sexual como el peor abuso, pasando por el maltrato físico, hasta la negligencia en el cuidado, se develan como una pandemia en sí misma.

Es por ello que cada instancia es valiosa, cada día una oportunidad y para cada ser humano un deber moral el hacernos cargo.