Especial Día de los Enamorados: Carta abierta al hombre que amé más que a mí misma

10 Febrero 2016

Lamentablemente el amor no siempre tiene un final feliz, y serán muchos y muchas que pasarán este día de San Valentín añorando estar con esa persona que nunca les correspondió.

Chile y el Mundo >
authenticated user Corresponsal

La carta que te presentamos a continuación, fue publicada en el portal opnlttr.com, y relata la historia de una joven que nunca fue correspondida, al menos, como ella hubiese querido. Un amor, que nunca fue.

Te sugerimos: ¿Cómo zafarse del síndrome de la mujer perfecta?

Te amo. Las palabras que sólo te dije una vez cuando estabas borracho y me respondiste que me amabas también. Quise decírtelas tantas veces pero tenía tanto miedo de arruinar lo que teníamos que me las callé.

Desde el primer momento en el que te vi, a los 18 años, supe que serías un verdadero problema, pero tampoco conocí a alguien que me hiciera sentir tantas cosas como tú. Hoy, 3 años después me sigues provocando las mismas cosas.

Al pasar los años te convertiste en alguien tan importante para mí como nunca imaginé, y aunque técnicamente nunca tuvimos una cita formal, algunos días que salíamos en verdad lo parecían.

También puedes leer: ¿20, 30, 40? Así cambia tu cuerpo con el paso de los años

Siempre me trataste como si fuéramos algo más que amigos pero también siempre me recordaste que no podíamos ser nada más que eso.

Siempre supiste lo que sentía por ti pero te aseguraste de repetirme que no me amabas, que no querías un futuro conmigo y que nunca podríamos ser más que amigos con derechos.

Sin embargo, nunca dejaste de tratarme como si fuera tu novia cuando estábamos solos o de repetirme que algún día te casarías conmigo.

En esos 3 años traté más de una vez de alejarme de ti, de olvidarte. Le pedí a Dios que pudiera seguir sin ti, pero aún no puedo. He aceptado que siempre te voy a amar, que me siempre me vas a importar y que ahí estaré para responder tus llamadas en la madrugada con la esperanza de que un día cambies de idea y quieras estar conmigo.

A menudo entras y sales de mi vida, y cada vez que lo haces me conviertes en la mujer más afortunada y más triste. Cada vez más me hacías promesas sobre un futuro juntos y cada vez más también deseo escuchar que me amas (y que no solo las digas cuando estés borracho y que al despertar no recuerdes nada).

Para mí, eres el hombre que me ha dado las mejores lecciones de la vida, que me ha hecho ser quien hoy soy, el que me ha enseñado a amar y a preocuparme por alguien más que no soy yo.

Eres el amor de mi vida, aunque sepa que nunca hemos salido en forma y que no me has dado esperanzas de corresponderme.

Eres el hombre del que les hablaré a mis futuras hijas, eres el hombre con el que comparo a cada chico que me invita a salir. Eres el hombre que desearía no haber conocido pero que agradezco haya aparecido en mi vida.

Eres el hombre que me hace odiarme a mí misma por querer estar siempre para ti cada que me necesitas.

Te convertiste en mi mejor amigo, alguien en el que podía confiar siempre, quien me tomó las llamadas en medio de la noche para escuchar mis problemas.

Pero también me diste los mayores dolores en el corazón, especialmente cuando descubría que habías bloqueado mi número, de nuevo, porque ya estabas saliendo con una nueva chica.

Pasé semanas contándole a mis amigas lo mucho que te odiaba y lo tonta que era por seguir confiando en ti. Pero cuando volvías a buscarme, ahí estaba para ti.

Hoy sé que sales con alguien más, y es duro para mi saber que estás feliz con ella, pero en el fondo deseo que hayas encontrado la felicidad en tu vida y que puedas experimentar el amor que yo siento por ti.

Hoy sé que no eres el chico que hace 3 años conocí. Maduraste, creciste y tienes un gran corazón. Eres inteligente, amoroso, protector y el hombre que siempre supe que serías. Sé que serás un gran esposo y padre en un futuro.

Quiero darte las gracias por todo lo que hiciste por mí, por estar ahí, por sentir que me amabas cuando nadie más lo hizo. Por ser mi amigo cuando más lo necesité.

Gracias por recordarme quién soy, por todo. Ojalá supieras lo mucho que significas para mí y lo especial que siempre serás.

Siempre estaré ahí para ti, porque, después de todo, eres el hombre que tiene mi corazón desde el principio.

Te amo.