¿Cómo proteger a nuestros hijos frente a la posibilidad de un secuestro?

01 Diciembre 2015
Ser padres incluye una serie de desafíos, entre ellos, enseñarles a los niños a tener cuidado sin llenarlos de miedo ni ansiedad. Si bien siempre existirá el peligro, con estos simples consejos se pueden disminuir las posibilidades de un secuestro.
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Las circunstancias que rodean un secuestro infantil a menudo son bastante distintas de lo que se ve en los programas de televisión y en las películas.

A continuación enumeramos algunos datos reales sobre el secuestro infantil:

  • En Chile, según informe de la PDI, más del 66% de los casos de secuestro son falsos.
  • La mayoría de las denuncias por desaparición de niños se deben a que el niño ha huido o a que hubo un malentendido con los padres en cuanto al lugar donde debía estar.
  • De los niños y adolescentes que son secuestrados realmente, en la mayoría de los casos el secuestrador es un familiar o conocido; el 25 % de los niños son secuestrados por extraños.
  • La mayoría de los menores secuestrados son adolescentes.
  • Es poco común que el secuestro se produzca en la escuela.

Estrategias para evitar los secuestros

Muchos de los casos de secuestro podrían resolverse más fácilmente si los padres pudieran dar información clave sobre sus hijos: estatura, peso, color de ojos y una fotografía clara y actual. Asegúrese de que sus hijos tengan información de seguridad que podría ayudar a evitar un secuestro.

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Las siguientes estrategias pueden resultar útiles:

  • Sáqueles a sus hijos fotografías para identificación cada 6 meses y, si es posible, haga que les tomen las huellas digitales.
  • Mantenga actualizados los expedientes médicos y dentales de sus hijos.
  • La seguridad en Internet debe ser una prioridad. Internet es una herramienta excelente, pero también es un lugar en el que los pedófilos acechan a los niños. Esté al tanto de las actividades que sus hijos realizan en Internet y de sus "amigos" cibernéticos, y recuérdeles que no revelen información personal.
  • No publique información de identificación ni fotografías de sus hijos en Internet.
  • Establezca límites en cuanto a los lugares que visitan sus hijos. Supervíselos en lugares tales como centros comerciales, cines, parques, baños públicos, o cuando realizan actividades para recaudar fondos de puerta en puerta.
  • Nunca los deje solos en un automóvil o el cochecito para niños, ni siquiera por un minuto.
  • Seleccione a las personas que cuidarán a sus hijos (niñeras y proveedores de cuidado de niños) minuciosamente y verifique sus referencias. Si arregló para que alguien pase a recoger a sus hijos de la escuela o la guardería, hable al respecto con sus hijos y con el personal de la escuela o la guardería.
  • No vista a sus hijos con prendas que tengan sus nombres impresos: los niños tienden a confiar en los adultos que saben sus nombres.

Cómo hablar con los niños sobre los extraños

Hable con sus hijos a menudo sobre la seguridad. Indíqueles los pasos más importantes para evitar situaciones potencialmente peligrosas y escapar. Enséñeles lo siguiente:

  • Nunca aceptar dulces ni obsequios de extraños.
  • Nunca ir a ningún lado con un extraño, incluso si la idea parece divertida. Los pedófilos pueden atraer a los niños con preguntas como "¿Me ayudas a buscar a mi perrito?" o "¿Te gustaría ver unos gatitos hermosos en mi auto?". Recuérdeles a sus hijos que los adultos que ellos no conocen nunca deben pedirles ayuda ni que hagan algo por ellos.
  • Correr y gritar si alguien los sigue o intenta hacerlos entrar en un automóvil a la fuerza.
  • Decirle no a toda persona que intente que ellos hagan algo que usted les dijo que está mal o que los toque de una manera que los hace sentir incómodos.
  • Siempre avisar a los padres o a algún otro adulto de confianza si un extraño hace preguntas personales, los expone o los hace sentir intranquilos. Asegúreles a los niños que está bien que le cuenten sobre este tipo de situaciones incluso si la persona los hizo prometer que no lo harían o los amenazó de alguna manera.
  • Siempre pedir permiso a los padres para salir de la casa, ir al patio o el área de juegos, o para ir a la casa de otra persona.

También recuerde estos consejos:

  • Asegúrese de que los niños más pequeños sepan su nombre, dirección, número de teléfono con código de área y a quién se debe llamar en caso de emergencia. Enséñeles a usar el teléfono de carabineros 133.
  • Hablen sobre qué deben hacer si se pierden en una tienda o un lugar público: en la mayoría de los lugares existen procedimientos de emergencia para casos de niños perdidos. Recuérdeles que nunca deben ir al estacionamiento a buscarlo. Indíqueles que pidan ayuda al personal de cajas o que se queden cerca de las registradoras o en la parte delantera del edificio, lejos de las puertas.
  • Señale las casas de amigos del vecindario donde sus hijos puedan ir en caso de que surjan problemas.
  • Asegúrese de que sus hijos sepan a qué automóviles pueden subirse y a cuáles no. Enséñeles que deben alejarse de cualquier automóvil que se les acerque y que sea conducido por un extraño, incluso si esa persona parece perdida o confundida.
  • Establezcan palabras en código para los cuidadores que no sean mamá ni papá, y recuérdeles a sus hijos no decírselas a nadie. Enséñeles que no deben irse con nadie que no conozcan ni con nadie que no sepa la palabra en código.
  • Si sus hijos tienen la edad suficiente para quedarse solos en casa, asegúrese de que tengan la puerta con llave y que nunca le digan a nadie que toque el timbre o llame por teléfono que están solos.

Fuente: kidshealth.org