Balance 2015: Deudas pendientes

Nuestra Región de los Lagos ha sido una de las menos golpeadas por la desaceleración económica y su consecuente aumento en el desempleo. Las cifras de desempleo son del orden de 3.4 % muy por el debajo del promedio nacional que está en un 6.3%. Esta ha sido una noticia que nos alegra a todos. Es de esperar que el gobierno haya aprovechado este momento de desarrollo económico del sector privado para preparase para una eventual desaceleración que puede venir producto de la que crisis que estaría empezando a enfrentar la industria del salmón, principalmente por los bajos precios internacionales y los aumentos de los costos de producción.

Sin embargo, en otras materias que tienen que ver no con el desempeño de los privados sino que del sector público, el balance del 2015 tiene ciertos déficit que esperamos que el gobierno los corrija durante el año 2016.

En materia de salud ya sabemos que las promesas que se hicieron en campaña presidencial no podrán cumplirse durante este período de gobierno porque ya se les fue el año 2015 sin haber tenido ningún progreso significativo. Y no por falta de recursos sino que por falta de gestión por parte de la autoridad. La ciudadanía ya se ha percatado que la reposición de todos los hospitales prometidos, esto es, el de Futaleufú, San Juan de Costa, Quellón, Ancud, Queilen,  no estarán terminados para el año 2017, porque ya se han perdido dos años. Lo mismo ocurre con el déficit de los médicos especialistas que siguen siendo escasos en toda la región.

En lo relativo a educación, ¿en qué se avanzó durante el año 2015? La bandera de lucha de este gobierno se dijo que iba a ser la educación. Pero el programa de gobierno en esta materia fue un simple eslogan. La improvisación que ha tenido el ejecutivo durante estos dos últimos años ha significado que la calidad de enseñanza de nuestros niños en los colegios y universidades no haya mejorado en nada. Además, se ha generado una incertidumbre que ha paralizado a los colegios particulares subvencionados en seguir invirtiendo. Por último, la  famosa educación gratuita universal solo llegará a ser para el próximo año para un 16% de los alumnos universitarios de nuestra región.

En vivienda, prácticamente solo se ha ejecutado los proyectos que venían del gobierno anterior. Al igual que en el año 2014, perdimos otro año más sin que el gobierno pudiera conseguir terrenos para la construcción de viviendas sociales en las comunas de Osorno, Maullín, Cochamó y en varias comunas de Chiloé, lo que ha significado no poder erradicar a familias completas que siguen viviendo en campamentos o en situaciones indignas.

A pesar de todas las encuestas y gráficos con los que se defiende el gobierno, todos sabemos que la delincuencia en nuestro país va en aumento. Y lo preocupante que cada vez se ejecutan los delitos con más violencia. Los asaltos que antes veíamos en las grandes ciudades del norte ya han pasado a ser noticias comunes en nuestra región. Y las autoridades no han sido capaces de poder frenar este flagelo mediante una buena coordinación de las policías, ministerio público y tribunales de justicia.

En fin, creo que en estas cuatro áreas que he mencionado: salud, educación, vivienda y seguridad, el gobierno debiera empeñarse en diseñar planes concretos de acción para el año 2016, de manera de poder, en esta misma fecha del próximo año, contar con un balance positivo, principalmente, para quienes más necesitan del  apoyo del Estado.

En agricultura poco se avanzado para detener el cierre de las plantas lecheras producto de la crisis que vive el sector debido al incontrolable alza de los precios. Como tampoco no hay soluciones concretas a los damnificados del volcán Calbuco y menos aún para Chaiten reconstrucción que luego de siete años los retornados siguen esperando.

Las cifra negras de la delincuencia posicionan a la región como la tercera en el país con mayor aumento de denuncias.

Iván Moreira Barros

Senador