Ataque Cerebrovascular (ACV): ¿Cómo identificarlo y qué hacer en caso de reconocer los síntomas?

El pasado sábado el exfutbolista Carlos Caszely fue internado de urgencias tras sufrir un ACV o Ataque Cerebrovascular. Según la información entregada por sus familiares, el jugador se encontraba junto a su hijo en el momento en que presentó los primeros síntomas, siendo derivado inmediatamente a un centro asistencial en donde recibió el diagnóstico de ACV isquémico.

“Un ataque cerebrovascular ocurre cuando se interrumpe el flujo sanguíneo de una arteria que le lleva sangre a alguna parte del cerebro. La mayoría de las veces, eso ocurre porque se tapa una de las arterias; a eso le llamamos ataque cerebrovascular isquémico. En otros casos, esto ocurre porque se rompe la arteria y a eso le llamamos hemorrágico”, comenta el neurólogo y presidente del Mes del ACV de Sonepsyn, doctor Rodrigo Guerrero.

La mayoría de los ACV se manifiestan con tres signos fácilmente identificables: asimetría en la cara (conocida como "cara chueca"), dificultad para hablar (lenguaje ininteligible) y debilidad en un lado del cuerpo (caída de un brazo al intentar levantar la mano). La presencia de uno solo de estos signos de aparición repentina puede indicar una alta probabilidad de estar sufriendo un ACV. En tal caso, es crucial que el paciente sea evaluado de inmediato en un centro de salud de urgencia hospitalaria.

El ataque cerebrovascular es una patología de urgencia tiempo dependiente, por lo tanto, mientras antes se pueda identificar y manejar se disminuye la probabilidad de tener secuelas.  “Es muy importante que se llegue lo antes posible a un centro de salud al identificar los síntomas. Basta solo uno de ellos para estar en presencia de un ataque”, añade el doctor.

Según señala el especialista, el ACV es una patología muy frecuente en nuestro país y sigue manteniéndose como una de las principales causas de muerte en Chile, con una incidencia anual de casi 40 mil casos, lo que equivale a un caso cada 15 minutos en el país. Sin embargo, son prevenibles, evitando factores de riesgo modificables, entre los que se encuentran las dietas poco saludables, niveles elevados de colesterol LDL (colesterol "malo") y el tabaquismo, entre otros.  

Foto:  Municipalidad de Ilustre Santiago en Flickr