¿Adiós para siempre? Así es la campaña que busca eliminar bombillas plásticas en la región

Una bombilla, simple elemento cotidiano, demora nada menos que  200 años en degradarse y tan solo tiene 20 minutos de vida útil.

Es en este contexto, que el Ministerio del Medio Ambiente realiza una campaña contra el uso indiscriminado de plásticos de un solo uso, con el objetivo de proteger los océanos junto con sus especies animales y vegetales-

Ante esto, el Seremi del Medio Ambiente de la Región de Los Lagos, Klaus Kosiel, extendió un llamado para dejar el uso de bombillas de plástico desechable.

"Si van a un restaurant de comida rápida pidan los bebestibles sin bombilla, o lo mismo en una cafetería. Lo ideal es que reservemos las bombillas para niños, adultos mayores o personas en situación de discapacidad. Ahora, en caso que sea necesaria, el llamado es a utilizar bombillas de acero inoxidable, vidrio o bambú, que se pueden lavar y reutilizar las veces que uno quiera", afirmó.

La solicitud también va dirigida a los establecimientos comerciales para que se sumen la iniciativa de eliminar el uso de este producto. Para hacerlo deberán ingresar deben ingresar al sitio web chaobombillas.cl e inscribirse a través de un formulario.

"S enviará al lugar físico el sello Chao Bombillas para que lo peguen en un lugar visible y así los clientes sepan de antemano que es un local adherido a esta campaña", explicó la autoridad.

Datos sobre las bombillas y su uso

• Se utilizan 500 millones al día sólo en Estados Unidos.
• 1 persona en promedio usa 38 mil bombillas en su vida.
• Una bombilla se demora 1 minuto en fabricarse, tiene 20 minutos de vida útil y demora 200 años en degradarse.
• Es el séptimo residuo más común en las costas - Informe de OceanConservancy de 2017. Se recogen cerca de 400 mil bombillas anualmente en el océano.
• Millones de aves marinas, peces, ballenas y tortugas mueren al año por desechos plásticos en el mar (Instituto de Investigación para el Desarrollo de Francia).
• No son reciclables y que la mayoría de las bombillas de plástico son demasiado livianas para pasar a través del clasificador de reciclaje mecánico.
• Terminan en el mar porque suelen dejarse en las playas y las arrastran las olas.
• Salen volando de botes de basura (muchas veces llenos). Las botan desde vehículos (autos, barcos, etc).
• Generan un profundo impacto en la fauna marina porque los animales las confunden con alimentos.

Imagen: Huawei / Agencia Uno