Sostenibilidad al sur del mundo y la necesidad de innovar

17 Agosto 2021
Hoy la sostenibilidad está en boga en los discursos de las empresas, ya sea por moda, porque la competencia la considera importante, porque lo piden los inversionistas o porque realmente se cree que es la forma correcta de hacer negocios.
Enrique Rosselot >
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Sustentabilidad, Los Lagos, Desarrollo local, Economía Circular

Hoy día en Chile temas como la economía circular, reactivación verde, energías limpias, reciclaje y biodiversidad son directamente vinculados con la sostenibilidad, pero la sostenibilidad es mucho más que eso. A nivel conceptual, significa poder equilibrar los aspectos económicos, ambientales y sociales de una actividad, permitiendo su desarrollo a lo largo del tiempo, sin comprometer una vida en armonía con la naturaleza también para las generaciones futuras.

Entonces, entendemos que es mucho más que un proyecto de reciclaje, un fondo concursable o una certificación: es una forma de adaptarse al entorno impactando en ello de manera positiva. No es trivial que en el sur de Chile se encuentren dos de las regiones con los índices más altos de pobreza multidimensional, La Araucanía y Los Lagos, y que en las mismas regiones se desarrollen actividades como la acuicultura que, según datos de Comercio Exterior de Aduanas de Chile, exportó el equivalente a 7.921 USD MM durante el 2020, solo detrás del cobre.

La industria acuícola vive una situación particular. Por un lado, tiene una buena proyección económica, con demandas sostenidas desde el exterior; sin embargo, por otro lado, ha protagonizado, en los últimos años, traspiés ambientales que no han estado exentos de polémicas, y esto sumado a la vasta extensión de sus operaciones, desde la región de La Araucanía hasta Magallanes y la Antártica Chilena. Lo anterior se traduce en la oportunidad de innovar con la sostenibilidad en el centro. Dejando de lado las lógicas asistencialistas en el relacionamiento comunitario, para dar paso a un trabajo de valor compartido.

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La empresa debe integrarse en los territorios como un actor más, en relación constante con las organizaciones territoriales (juntas de vecinos, los comités de APR, UNCO´s, etc) otras organizaciones de la sociedad civil, las autoridades municipales y regionales y otras empresas presentes en el mismo territorio, para que de tal forma puedan generar aportes concretos que vayan más allá de la renovación de una sede social o de la instalación de un punto limpio, sino por ejemplo, a través de la difusión de capital técnico y disposición de tecnologías para la solución de problemas cotidianos en los territorios que acrecientan estos altos niveles de pobreza multidimensional. 

Es imperioso entender que la sostenibilidad del negocio debe abordarse de manera estratégica, donde convivan de manera armónica los aspectos económicos, ambientales y sociales, sin comprometer las presentes y futuras generaciones. De esta forma, desde Gestión Social proponemos abordar la sostenibilidad en los territorios transformando las oportunidades en resultados de manera innovadora a través del trabajo con múltiples actores, creando valor concreto y tangible para la empresa y la sociedad.