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La familia de Brithany Rauque, menor de 13 años que padece de cáncer a la sangre, acusó al Estado por negarse a darle tratamiento y desahuciarla, dándole una esperanza de vida de entre 3 a 6 meses de vida desde Hospital Luis Calvo Mackenna en Santiago.

La adolescente, origunda de Frutillar y Tacamo Alto, adeuda en estos momentos más de 180 millones de pesos, debido a que un hospital privado le realizó el transplante que necesitaba para recuperarse. Sin embargo, esta suma podría aumentar, debido a las infecciones que presenta.

Pero esto no es todo ya que, Fonasa tiene un plazo de 10 días para responder a las acusaciones. Brithany finalmente pudo realizarse el trasplante de médula gracias a la donación de uno de sus hermanos, además de la realización de diversas actividades a beneficio de su operación.

Al respecto, Rodrigo Arismendi de la agrupación "Apoyemos la causa", que respaldó el caso, aseguró que el sistema de salud público cayó en contradicciones en el procedimiento.

"Ese comité (del sistema público) decidió que Brithany tuviera un tratamiento paliativo, todavía no estaba considerado el trasplante. Es decir, tenía que seguir dos meses esperando. Eso se contrapone al informe entregado por la Universidad Católica que dice que era necesario y urgente el trasplante", comentó, indicando que por esto reclamaron a la Superintendencia de Salud, donde Fonasa debería responder y  asumir los costos del procedimiento.

"El siguiente paso es poner un recurso de protección contra el Estado. Ellos no se pueden negar a algo que existía", afirmó.

La menor permanece internada en la Universidad Católica, y dada a una infección en sus pulmones, necesita transfusiones 2 veces al día, necesitando dadores tipo A y O negativo en el banco de sangre del centro asistencial.