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Durante la jornada de este lunes se dieron a conocer novedades respecto de la situación del buque Seikongen, actualmente fondedado frente a las costas de Ancud.

Al respecto, el intendente, Harry Jürgensen, reconoció que "el barco tenía un destino y por lo mismo tenía un zarpe e iba a ser destinado a Talcahuano, pero por razones judiciales esto no es posible por cuanto se acogió el recurso de no innovar"

Recordemos qu el buque no pudo viajar desde Chiloé hasta Talcahuano, debido a que la Corte de Apelaciones de Concepción acogió una orden de no innovar incorporada en un recurso de protección interpuesto por el alcalde de la ciudad, Henry Campos. Las razones de esta acción judicial se deben a que a juicio del alcalde, las 100 toneladas de salmón en descomposición que aún se encuentran al interior del barco podrían causar algun tipo de peligro para la población.

"El futuro no está determinado, pero lo ideal sería descargar el contenido del barco y someterlo a un tratamiento en alguna planta legalmente habilitada para aquello. Veremos si eso es posible. El barco estuvo hundido 8 meses y realmente nunca generó algún peligro o contaminación en el lugar en que estaba en Chonchi, ni tampoco generó ningún peligro o riesgo para la salud humana y en ese mismo estado se encuentra", enfatizó Jürgensen ante esta situación.

Complementando lo expuesto por el jefe regional, el Comandante en Jefe de la Vª Zona Naval, Contraalmirante Carlos Fiedler, destacó además el trabajo coordinado entre la Armada y los servicios públicos que en todo momento han estado pendientes de lo que ocurre con el Seikongen.

"Nos preocupa el medio ambiente acuático, es por eso junto a otros sectores como Salud, Medio ambiente y Sernapesca hemos venido a informar al Intendente y al Gobierno Regional para que la ciudadanía esté tranquila, porque el buque se está manejando de una forma segura como se ha hecho en los últimos 8 meses", sostuvo Fiedler.

Por otro lado, recordó que como Armada mantienen controles respecto a la seguridad de la navegación del buque, para lo cual se revisa periódicamente y diariamente la estanquedad y la flotabilidad del buque.

Finalmente,  la preocupación también está enfocada en las dotaciones y personal que trabaja “porque hay un producto que está contenido, que no se vierte ni al mar ni al ambiente, pero que también hay que tomar las precauciones para cuando se realizan todas las revisiones diarias y monitoreos que se hacen en la superficie del buque", explicó.