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¿Conoces a alguien que se comporte bien cuando está bajo presión?

Muchos pensamos que cuando estamos bajo presión sabemos como actuar, pero la verdad es que eso no ocurre así, o por lo menos no nos comportamos tan bien como podríamos hacerlo.

Cuando se está bajo presión, quizás alguno se puede sentir más creativo, pero la verdad es que es un sentimiento y no una realidad. Puede ser cierto bajo presión se logre una mayor productividad, pero también es cierto que por lo general los resultados de esa producción no son los más óptimos. 

¿Y ENTONCES?

Hendrie Weisinger y JP Pawliw-Fry escribieron el libro "Realización bajo presión: la ciencia de hacer lo mejor que pueda cuando importa" [6], y entregan una triste verdad: la diferencia entre la gente común y las personas “ultra exitosas” no es que este último grupo de personas prospere bajo presión, sino que son capaces de mitigar sus efectos creativos.

En el texto, los autores ofrecen 22 ideas con las cuales –si se ponen en práctica-  se puede llegar a dar lo mejor de sí en aquellos momentos en que se encuentran bajo presión.

Aquí dejamos una selección de algunos de los tips que pueden ser de gran ayuda:

1. Piense en los momentos bajo presión como un desafío entretenido y no como una amenaza de vida o muerte.

La mayoría de las personas ven las situaciones bajo presión como amenazas, lo que provoca que realicen aún menos de lo que podrían, ya que el miedo al fracaso deteriora su memoria a corto plazo, atención y juicio a la vez que estimula el comportamiento impulsivo. 

"Cuando vea la presión como un desafío, será estimulado para dar la atención y energía necesaria para hacer su mejor esfuerzo", dice en el libro.

Para practicar esto en su vida diaria piense que no es solo un proyecto, sino que es una oportunidad para ver su usted puede hacer el mejor proyecto que jamás haya hecho.

2. Recuerde que es solo una de muchas oportunidades

¿Es esta situación de mucha presión una buena oportunidad? Claro. ¿Es la única oportunidad que tendrá para el resto de su vida? Probablemente no. 

"El hecho es que hay que ser realista cuando se piensa en las otras oportunidades que se nos pondrán en el camino", dicen Weisinger y Pawliw-Fry y animan en su libro a considerar cuántas personas necesitaron múltiples posibilidades para finalmente alcanzar el éxito

Antes de una entrevista o una reunión grande, dígase a sí mismo: "Tendré otras entrevistas" (o presentaciones o llamadas de ventas).

3. Haga un plan para lo peor

Los escenarios de "¿qué pasaría si...?" pueden ser algo positivo.

Al imaginar los peores resultados de los casos, usted será capaz de prepararse para ellos.

4. Tome el control

En una situación de presión hay factores sobre los que usted tiene el control y otros en los que no.

Pero cuando se centra en los que no puede controlar, la presión termina siendo mucho peor, aumentando su ansiedad y en última instancia, socava su confianza. Lo que debe hacer es centrarse en los factores que se pueden controlar.

En el caso de una entrevista de trabajo, por ejemplo, no piense sobre quién más podría haber aplicado para el trabajo o si el entrevistador le va a gustar su ropa. ¿La única cosa que importa? Preparación para demostrarles que usted es el adecuado para el papel.

5. Escuche o haga un poco de música

"Lo que hace que este método sea una solución eficaz es que se reduce el aumento de la ansiedad", escriben Weisinger y Pawliw-Fry.

Al escuchar música, se es capaz de distraerse literalmente a sí mismo de su ansiedad. Y convenientemente, este truco es muy fácil de poner en práctica.

La próxima vez que se enfrente a una situación de alta presión - una gran presentación, por ejemplo - pase unos pocos minutos antes de ésta, escuchando algunas canciones agradables.

Más tips en el articulo de Business Insider. [7]