Interno fallecido habría sido atacado por ser informante de gendarmes

11 Agosto 2017

El hecho marca una recurrente problemática, pues en menos de 6 meses ya han muerto 3 internos en situaciones similares.

Equipo El Repuertero >
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Continúan las indagaciones por parte de la Brigada de Homicidios de la PDI para determinar la causa del violento ataque que provocó la muerte de un interno de la cárcel de Alto bonito ocurrido el pasado miércoles 9 de agosto.

Ver también: Reo muere tras violento ataque al interior de una cárcel

Según informó Soypuertomontt, la víctima, identificada como Roberto Soto -proveniente de La Pintana, Santiago-, habría sido asesinado por haber entregado información a los gendarmes, lo que habría provocado malestar en sus compañeros y los golpes que estos le propinaron y culminaron con su vida.

Así lo confirmó el inspector Andrés Bueño, de la Brigada de Homicidios, quien señaló al sitio lo que encontraron al revisar las cámaras de seguridad del lugar, donde se aprecia que el atacante, de 22 años, le causa la grave herida que derivó en su muetre.

“No se estableció si existen rencillas anteriores, pero la víctima habría entregado información a oficiales de Gendarmería, cosa que en la jerga de ellos (internos), ello no le es permitido. Se deben identificar al resto de los participantes en la agresión, y ello se está indagando”, sostuvo Bugueño.

SERIE DE INCIDENTES

Sin embargo, lo ocurrido este miércoles no es el único hecho de esta envergadura en el recinto, ya que a este se suman otros 2 asesinatos en menos de 6 meses.

El 6 de marzo un arma artesanal falleció producto de un apuñalamiento, el imputado Cristian Núñez Villarroel, estaba en prisión preventiva y en proceso judicial el delito de robo en lugar habitado.

Luego, el 3 de julio Carlos Flores, fue asesinado en circunstancias similares, con un cuchillo de fabricación propia dentro del penal.

No obstante, el director regional de gendarmería, coronel Gino Sanguinetti, aseguró al medio que estos sucesos son puntales y que están atentos a este tipo de situaciones, por lo que tras el hecho ocurrido el pasado miércoles se reforzó la seguridad en el recinto penitenciario.

“El riesgo de riña o agresión está presente, particularmente en internos refractarios al sistema, de alto compromiso delictual y que rechazan todo tipo de intervención”, sostuvo el coronel.