[Opinión] "El ciudadano y su poder"

01 Noviembre 2015

Lee la columna del Coordinador Provincial de Amplitud Foch Metayer

Corresponsal El... >
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Los escándalos que han afectado a la clase política en los últimos meses que han remecido al país, tienen a la comunidad triste, decepcionada y con una visión negativa sobre el accionar político, lo que ha provocado que los ciudadanos aumenten su rechazo hacia ellos.

 Lo anterior, nos debiera hacer cuestionarnos el concepto de ciudadano,que por definición es aquella persona que coexiste en la sociedad. En concreto, ser ciudadano indica un conjunto de derechos políticos, civiles y sociales, que se fundan e inician en nuestro país bajo el alero del artículo 13 de la Constitución. Cuando una persona cumple los 18 años de edad y no ha sido condenado a pena aflictiva está en condiciones de convertirse en ciudadano. Esta calidad nos otorga ciertos derechos políticos tales como: el derecho a sufragio y el derecho a optar a cargos de elección popular, entre otros.

 Actualmente, los bloques políticos dominantes están creando nuevos nombres como una estrategia de marketing, con el sólo objetivo de desmarcarse de las estructuras anteriores, su significado y legado histórico, cuya imagen la gente observa con resquemor y suspicacias. Sin embargo, están empezando a surgir nuevos movimientos, como es el caso de Amplitud, cuyos integrantes quieren posicionar y mostrar rostros frescos, pero también renovar la forma de hacer política, con ideas que se escapan del status quo imperante.

 Es por ello que debemos mostrar a la sociedad, como miembros activos del cambio, que la forma de hacer política es empoderando a la gente, a través del voto o, derechamente,invitándolos a participar de manera más activa, y así lograr cambiar las estructuras de poder que nos han dominado los últimos 25 años.

 El poder lo tenemos los ciudadanos. No sólo es un deber, sino que un derecho adquiridoque no debemos desestimar. No podemos ni debemos esconder la cabeza bajo la tierra, pues nos tapamos la cabeza pero dejamos al descubierto nuestras partes traseras que las castas políticas aprovechan de usar. Esta realidad sólo la podemos modificar ejerciendo nuestros derechos y estando vigilantes a las actuaciones de nuestros representantes. Hoy tenemos la oportunidad de cambiar la política, de todos depende…¡no se quede fuera!

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